Salud Espiritual: 7 hábitos para fortalecer tu salud espiritual

La palabra de Dios está llena de promesas para bendecir cada área de nuestra vida, pero con todas las promesas de Dios siempre hay una premisa. Por ejemplo, la Biblia dice que si confesamos nuestros pecados (esa es la premisa), el perdonará nuestros pecados, (esa es la promesa). La Biblia dice, reconócelo en todos tus caminos (esa es la premisa), Él enderezará tus sendas (esa es la promesa).

Vamos a ver las promesas de Dios que te ayudarán a desarrollar los siete hábitos que fortalecerán tu salud espiritual. Dios ha prometido que si prácticas estos 7 hábitos, Él te bendecirá con una fuerte salud espiritual.

1 . Debo amar a Jesús supremamente

Eso es un hábito.  En Lucas 14:26 Jesús dijo esto: "si alguno de ustedes quiere ser mi discípulo, tendrá que amarme más que a su padre o a su madre, más que a su esposa o a sus hijos, y más que a sus hermanos o a sus hermanas. Ustedes no pueden seguirme a menos que me amen más que a su propia vida".

Eso suena algo radical, pero ¿qué es lo que está diciendo?, está diciendo que debes amar a Jesucristo más que a cualquier otra cosa.

La salud espiritual es medida por el amor.

La salud espiritual es medida por cuánto amas tú. No se mide por cuánto sabes, no se mide por tu conocimiento bíblico, no se mide por tus habilidades, no se mide por las palabras que dices o por cuánto frecuentas la iglesia. Tu salud espiritual se mide por cuánto amas a Dios y cuánto amas a los demás.

Jesús dijo en Marcos 12: 29-30:
"El mandamiento más importante es... Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón (apasionadamente), con toda tu alma (voluntariamente), con toda tu mente (intencionalmente) y con todas tus fuerzas (prácticamente)

En la Biblia hay una palabra para esto. Amar a Dios es adoración. Lo que sea que más ames en la vida es lo que adoras. Si tu carro es lo que más amas, adoras a tu carro. Si lo que más amas es tu trabajo, adoras tu trabajo. Si lo que más amas es tu cuerpo, te adoras a ti mismo. Adoras todo aquello a lo que le das más amor.

Dios dice: "Si quieres ser espiritualmente saludable debes amarme más a mí, adorame supremamente"

2. Debo encontrarme con Dios diariamente.

Pueden ser 5, 10 ó 15 minutos, pero debes hacer una cita con Dios. Encuentráte con Dios. Sólo siéntate allí y silenciosamente di: "¿Dios, hay algo que quieras decirme?" Habla con Dios en oración, acerca de las cosas que estás pensando y luego deja que Dios te hable su Palabra. Eso es adoración.

Proverbios 8:34 dice: "Dichosos los que me escuchan y a mis puertas están atentos cada día, esperando a la entrada de mi casa."

Encierra la frase "cada día". Dios quiere que hagan una cita diaria con Él. Un hábito diario de encontrarse con Dios. ¿Porque querría Dios que pases tiempo con él, si él no quisiera pasar tiempo contigo? Te das cuenta de eso. El Dios del universo quiere pasar tiempo contigo. Es importante para Dios. Él siempre se hace presente a la cita, pero ¿qué hay de ti? Si estudias la historia de la Iglesia te darás cuenta de que cada gran creyente que ha sido muy bendecido y usado por Dios, ha tenido este hábito de encontrarse diariamente con Dios. No tiene que ser mucho tiempo, pero tiene que ser habitual.

3. Debo estudiar y hacer su palabra

No solamente estudiarla sino también hacerla. Hay tantas promesas en la Biblia donde Dios dice: "Si tomas éste libro y llenas tu corazón y tú mente con él, bendeciré tu negocio, bendeciré a tu familia, bendeciré tu salud, bendeciré tus finanzas. Donde quieras que Dios te bendiga debes edificarlo sobre la Biblia.

Salmos 1:1-3 dice: "Dichoso el hombre... que en la ley del Señor se deleita, y día y noche medita en ella..." Esa es la premisa y ésta es la promesa: "Es como el árbol plantado a la orilla de un río que, cuando llega su tiempo, da fruto y sus hojas jamás se marchitan.  ¡Todo cuanto hace próspera!"

"...cuando llega su tiempo da fruto" eso significa que vas a ser más productivo. ¿Quieres ser más productivo? debes meditar en la palabra de Dios.

"...Y sus hojas jamás se marchitan" significa que cuando estás bajo presión no te marchitas porque tienes raíces profundas"

"Todo cuanto hace próspera" Dios quiere prosperarte en todo lo que haces.

Recuerda, no es suficiente solamente estudiar la palabra, meditar en ella, sino que también debes hacerla. Jesús lo dijo de esta forma en Juan 15:14: "Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando"

Santiago 125 nos dice cómo hacerlo: "Quien se fija atentamente en la ley perfecta que da libertad (La Biblia), y persevera en ella (es algo constante), no olvidando lo que ha oído (memorizar) sino haciéndolo (actuar), recibirá bendición al practicarla"

4. Debo diezmar de mis ingresos

Una y otra vez en la Biblia nos dice eso. Significa que al igual que regreso a Dios la primera parte de mi día, le regreso a Dios la primera parte de mi dinero, y le devuelvo el 10% de lo que gano. ¿Porque me pide Dios eso? Obviamente Dios no necesita mi dinero, pero si quiere lo que representa, él quiere mi corazón. La Biblia dice "dónde está tu tesoro está tu corazón" Más adelante hablaremos más al respecto, en la sesión de salud financiera.

Malaquías 3:10 es una de las más grandes promesas de la Biblia, y si estás atravesando tiempos financieramente difíciles, estás bajo estrés por tu dinero y tus finanzas, si apenas te alcanza para llegar a fin de mes, necesitas esta promesa: "Traigan integró el diezmo para los fondos del templo, y así habrá alimento en mi casa. Pruebenme en esto –dice el Señor Todopoderoso–, y vean si no abro las compuertas del cielo y derramó sobre ustedes bendición hasta que sobreabunde."

"Pruebenme en ésto" en esta parte Dios nos está retando. Dios dice "Hagamos un pequeño juego, yo les daré y ustedes me dan, a ver quién da más" ¿Sabes una cosa? Dios siempre gana.

5. Debo aprender a amar a otros creyentes

Dios no quiere que lo ames solamente a Él, quiere que ames a otros creyentes, Jesús lo dijo de esta forma, "si quieres ser mi discípulo no debes amarme sólo a mí, debes amar a todos en mi familia".

Juan 13:35 dice: "si se aman los unos a los otros, todo el mundo se dará cuenta de que son discípulos míos."

Este es el sello de ser un discípulo de Jesús, no se trata de que te reconozcan por la calcomanía en tu auto o que sepan que eres cristiano por la camiseta que traes puesta. Dios dice que la prueba de que eres su discípulo es que prácticas el hábito de amar a otros creyentes. Debes amar a la familia de Dios, amar a los hijos de Dios, es decir amar a la Iglesia de Dios. Alguien que dice "yo amo a Jesús, pero no me gusta la iglesia" simplemente no es un discípulo. ¿Por qué? Porque con todas sus imperfecciones, todas sus faltas, ridiculeces, todos sus fracasos, Jesús dice qué la Iglesia es importante. Es la familia de Dios. Es la novia de Cristo. Jesús murió por su Iglesia. Así que, si no amas la Iglesia, no te va a gustar el cielo, porque serán los únicos que estarán allá, así que más te vale aprender como amar a otros discípulos.

1 Juan 4:20
Si alguien dice: "Amo a Dios" pero odia a un hermano en Cristo, esa persona es mentirosa pues, si no amamos a quienes podemos ver, ¿cómo vamos a amar a Dios, a quien no podemos ver?

El crecimiento espiritual ocurre en comunidad

No cuando estoy solo. No puedes ser un discípulo si estás solo. No puede ser un seguidor de Cristo si no estás en comunidad, porque todo se trata de amor. Nunca conseguirás la madurez espiritual sin una familia espiritual. Tal vez consigas conocimiento bíblico, pero no crecerás en amor si no estás con otras personas.

Juan 13:35
"Si se aman los unos a los otros, todo el mundo se dará cuenta de que son discípulos míos."

La frase "los unos a los otros" se menciona 58 veces en la Biblia. La Biblia dice que nos amemos unos a otros, que nos ayudemos unos a otros, que cuidemos y que sirvamos unos a otros, que nos animemos unos a otros, que oremos unos por otros, que nos apoyemos unos a otros. La Biblia dice una y otra vez, que debemos preocuparnos unos por otros.

6. Debo servir a otros desinteresadamente

Servir es una parte importante de tu salud y desarrollo espiritual por qué Dios dice que crecer no es solamente asimilar, también tienes que dar. Tienes que usar esos músculos que Dios te dio. Tienes que usar esa fuerza. Dios dice: "Si quieres ser la persona más importante en la habitación entonces debes tomar el último lugar y servir a los demás". La forma de ser grande es a través del servicio. Debes entregar tu vida.

Jesús lo dijo así en Marcos 10:45 

"Pues ni aún el Hijo del Hombre vino para que le sirvan, sino para servir a otros y dar su vida en rescate por muchos."

Resalta las palabras "servir" y "dar". en ese versículo Jesús nos da los dos propósitos principales en la vida luego de la adoración. Jesús dice: "yo vine para servir y para dar" eso define la vida cristiana. Cuanto más aprendes a servir y cuanto más aprendes a dar serás más como Jesús y serás más feliz, estarás más realizado, estarás más saludable y serás más bendecido.
¿Por qué el servir es un hábito tan importante en el crecimiento espiritual? Mucha gente va a la iglesia a alimentarse y a alimentarse y no llevan a cabo el servicio, porque el servicio es como el ejercicio espiritual. Si solamente nos alimentamos, si solamente venimos a la iglesia y escuchamos, si solamente hacemos estudios bíblicos, pero en realidad nunca hacemos nada, es como comer, comer y comer y nunca quemar calorías, te pondrás más grande y estarás espiritualmente gordo. Si no haces ejercicio espiritual, de ninguna forma desarrollarás músculo espiritual y nunca crecerás y nunca recibiras la bendición de Dios sobre tu vida.

7. Debo compartir las buenas noticias

En otras palabras lo que he recibido debo compartirlo con los demás, debo decirle a otros las buenas noticias de Jesús, debo decirle a los demás que hay un propósito para sus vidasque pueden ser perdonados, que pueden tener un hogar en el cielo.

2 Timoteo 2:2
"Lo que me has oído decir en presencia de muchos testigos, encomiéndalo a creyentes dignos de confianza, que a su vez estén capacitados para enseñar a otros.

Observa que hay cuatro generaciones en este versículo: Pablo dice: "Dios me dio las buenas noticias" esa es la primera generación y luego le dice a Timoteo que es la segunda generación: "debes encomendar lo a otras personas" esa es la tercera generación "que estén capacitados para enseñar a otros" esa es la cuarta generación. El hecho es que tú vas al cielo porque alguien te hablo a ti, y alguien le habló a ese alguien que te hablo a ti, y alguien le habló a ese alguien que le habló a ese alguien que te hablo a ti. Esta es la pregunta ¿Se romperá la cadena contigo? ¿Hay alguien que irá al cielo debido a ti?¿Le has hablado a alguien? El cristianismo siempre está a una generación de distancia de morir. Si tú no le dices a alguien entonces quién le dirá. Estarías dependiendo de alguien más, es decir eres espiritualmente estéril.

Mateo 28:19-20
"Por lo tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Enseñen a los nuevos discípulos a obedecer todos los mandatos que les he dado. Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos."

Jesús dijo que para ser su discípulo debed ser un verdadero hacedor de discípulos. debes estar dispuesto a compartir tu esperanza, a compartir tu fe, a compartir tu historia con otros. Solamente planta la semilla y Dios la hará crecer. Puedes imaginarte cómo será llegar al cielo y que alguien allí se acerque a ti y te diga "quiero agradecerte, yo no estaría aquí si no fuera por ti, tú me hablaste de Jesús y voy a ser tu amigo para siempre"


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